28 de agosto de 2007

Sí, pero no

Llegó un punto en el que ya no era yo. Ahora me daba cuenta de que no lo controlaba, ahora me estaba controlando ella a mi. Jamás la controlé, aunque estuviera convencida de ello. Bueno, en realidad, tampoco entonces, porque no queria ver que estoba mal, realmente jodida. Me miraba y no me reconocia. La imagen que me devolvia ese cruel aliado del baño no podia ser yo. ¿Dónde estaba el color de mis mejillas? ¿Dónde la vitalidad de la juventud? ¿Dónde estoy?
Solo pretendia encontrarme bien y ya ves como he quedado. Esos malditos comentarios. Pero no, no quiero echarle la culpa a lo que no la tiene. Soy la responsable, ahora si lo sé. Pero de cualquier modo, me afectaban… Y lo siguen haciendo, aunque de forma diferente. Solo me puedo acordar de los mios, tienen que haber sufrido demasiado. Y yo, ¿mientras que ellos se preocupaban de mi, que hacia? Tambien me preocupaba por mi. Ellos no lo veian, pero sufria antes, después ya no. Era feliz. Era capaz de verme. Distorsionada, pero me veia como yo queria.
Pero después ya no era suficiente, queria más. Y me sentía capaz de conseguirlo. Y asi fue cambiando el carácter. No queria estar con la gente, porque me decian cosas que no queria escuchar. Ahora miro con perspectiva y es curioso… mi principal “motivo” (al menos lo crei asi) era para encontrarme más a gusto con la gente, y ahora, que estaba consiguiendo mi propósito, me alejaba de ellos. Pero nunca conseguí lo que quise, siempre pensaba que estaba un poco más lejos, tenia que probar hasta donde era capaz de llegar. Me ponia pequeñas metas y cada vez las iba subiendo. Pero hubo un momento en que ya no eres capaz de reducir más y comencé a hacer trampas. Y comenzaron los desvanecimientos, que achacaba al calor delante del resto del mundo, que empezaba a preocuparse por mi. Cesaron los comentarios “positivos” y comenzaron las críticas hacia mi. Pero no las escuchaba. Yo sabia que no pasaba nada, que estaba bien. Y continuaba alejandome de la gente. No consentia que me miraran, me dolian sus miradas, como puñales. Como tambien me duele mirame a mi misma. No puedo ser yo, estoy peor que al principio…
¿Cómo era yo antes? Discreta, con grandes amistades, feliz a ratos, trabajadora… Normal… ¿Y que soy ahora? Nada, sencillamente nada. Me miro las manos, ¿Dónde están esas preciosas uñas de las que me sentía orgullosa? Estan quebradizas, se rompen, porque no tienen fuerza. ¿y mis ojos? Han perdido su vida, su brillo, son incapaces de abrirse completamente, dibujados sobre unas profundas ojeras, de cansancio, aunque lleve casi todo el dia en cama…No tengo fuerzas casi para llorar. ¿Cómo me ha pasado esto? … ¡Mamá! Ayudame, quiero despertar de esta pesadilla que llamaba sueño. Me estoy consumiendo… Y no quiero, no puedo sola…no quiero, no quiero.
Estaba a un paso de no poder volver atrás
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En los vértices del tiempo. Design by Exotic Mommie. Illustraion By DaPino